La historia del yate maldito más hermoso del mundo: muertes sospechosas, asesinatos y matrimonios nefastos

La historia del yate maldito más hermoso del mundo: muertes sospechosas, asesinatos y matrimonios nefastos

Cortesía

 

“Es mejor llorar en un Rolls-Royce que ser feliz en una bicicleta”, solía decir Patrizia Reggiani. Era el destino de todos los caprichos que sofocaba Maurizio Gucci cuando aún eran pareja. En medio del idilio entre ambos y con el crecimiento de la marca en el mejor momento de la industria de la moda italiana, emergió una perla negra. Esa que como una efigie egipcia oculta en una pirámide, bastaba con ser poseída para determinar el fin y la caída. Creole, se llama. Muchos dicen que ha sido responsable de varios destinos desafortunados. Para los Gucci parece que todo comenzó con la posesión de ese yate maldito.

Por: La Nación

Los hechos consumados revelan que Reggiani había nacido en la pobreza, sin la posibilidad de conocer a su padre. Cuando tenía 12 años, su madre -hasta entonces moza- se casó con un millonario, Ferdinando Reggiani, y éste la adoptó, catapultándola al jet set. Convertida en una princesa del ambiente italiano, conoció a Maurizzio en una fiesta en 1970. Se casarían dos años después, aún en contra del padre de él, Rodolfo, quien consideraba a Patrizia una cazafortunas, y tendrían dos hijas: Alessandra (1977) y Allegra (1981).

A la señora Gucci, a quien apodaban la “Joan Collins de Monte Napoleone”, en alusión a la actriz protagonista de la serie Dinastía, célebre por entonces, la tentaba el lujo y la extravagancia. Entre sus deseos, apareció la obsesión por el Creole. Por años catalogado como el velero más bello y grande del mundo realizado en madera.

Una tragedia griega

Diseñado por Charles E. Nicholson, el Creole (aunque no era conocido con ese nombre por entonces) fue el yate más grande construido en la historia del astillero británico Camper & Nicholsons. Una goleta de tres mástiles con vela de estay que se presentó en 1927, transformándose en el velero más bello del mundo al momento de su botadura.

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