Pediatra explicó cómo fue que los niños se mantuvieron con vida 40 días en la selva

Pediatra explicó cómo fue que los niños se mantuvieron con vida 40 días en la selva

De acuerdo con la pediatra, el que corría mayor peligro era el niño más pequeño, que al momento del accidente tenía apenas 11 meses. Foto: Twitter @petrogustavo

 

 

Un bebé de 1 año de edad debe recibir, diariamente, entre tres y seis raciones de comida. Pero más allá de eso, debe mantenerse hidratado constantemente, y tomar al menos de 4 a y 5 vasos de líquido. De no hacerlo, la deshidratación puede aflorar en cuestión de horas. Por eso, explica la médico pediatra colombiana Clemencia Mayorga, para los niños perdidos en la selva amazónica la mayor bendición fue el acceso constante a agua, pero también, los conocimientos de los niños mayores.





Por Edwin Caicedo | EL TIEMPO

“Una parte importante de la supervivencia, hablando de la fisiología de los niños, es la hidratación. La falta de agua a los niños los lleva a una situación peligrosa muy rápidamente, en apenas pocas horas. Esto quiere decir que ellos durante 40 días tuvieron, puede uno pensar, siempre agua disponible. Agua de lluvia o de arroyos, que debe ser de buena calidad y eso evitó que pudieron llegar a la deshidratación, que en el niño de 1 año de edad puede darse en cuestión de horas”, enfatiza Mayorga.

De acuerdo con la expresidenta de la Sociedad Colombiana de Pediatría Regional Bogotá, lo cierto es que aun con acceso constante al agua los niños debieron, probablemente, haberse alimentado de alguna dieta vegetal que los ayudara a obtener parte de la energía que requerían para hacer las extensas caminatas a las que estuvieron expuestos.

Según la experta, en ese punto probablemente fueron claves los conocimientos de los niños mayores (Lesly de 13 años y Soleiny de 9), quienes, dice Mayorga, fueron muy seguramente los encargados de proveer ambas cosas a los más pequeños (Tien de 4 años y Cristin, que cuando sucedió el accidente tenía apenas 11 meses).

Lo que sí es evidente a partir de las fotografías que se han conocido, enfatiza Mayorga, es que los niños están en un grave estado de desnutrición, probablemente por la falta de acceso a proteínas.

Lea más en EL TIEMPO