Un juez federal dictaminó que Estados Unidos pagará más de $10 millones de dólares en daños a la familia de Esther Nakajjigo después de que ella muriera en un accidente en un parque nacional de Utah en 2020.
Por El Diario NY
Los abogados que representan a su familia celebraron la decisión y dijeron que era el veredicto federal de muerte por negligencia más grande en la historia del estado.
“Con su veredicto, el juez Bruce Jenkins le ha mostrado al mundo cómo funciona el sistema de justicia estadounidense para responsabilizar a su propio gobierno y valora enormemente todas las vidas, incluida la de Esther Nakajjigo, una joven notable de Uganda”, dijo Randi McGinn, abogada de la familia en un comunicado, según The Associated Press.
La activista de derechos humanos ugandesa de 25 años y su esposo Ludovic Michaud estaban de vacaciones solo unos meses después de su boda.
En el borde del Parque Nacional Arches, una puerta de metal que normalmente estaba asegurada con un candado quedó sin ataduras. Las áreas de recreación se habían abierto luego de los cierres relacionados con la pandemia de Covid-19.
Cuando Nakajjigo y su esposo salían del parque, las ráfagas de viento sacudieron la puerta rápidamente. La fuerza fue suficiente para atravesar la puerta del lado del pasajero de su automóvil, decapitando a Nakajjigo mientras su esposo estaba sentado en el asiento del conductor.
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