Carlos III prueba su amor a Camila Parker poniendo fin a una de las tradiciones más recordadas de Isabel II

El rostro de la reina consorte ahora acompañará la tradición más querida de los británicos.
Créditos: Instagram @clarencehouse

 

El rey Carlos III no deja de robarse todos los titulares con sus polémicas decisiones como el nuevo representante del reino Unido y es que tan sólo ha pasado poco más de un mes de la muerte de su madre y las cosas han cambiado bastante; si hace unos días la novedad es que pondría a la venta a los amados caballos de la difunta monarca, ahora el esposo de Camila Parker ha puesto “fin” a una de las tradiciones más recordadas por los británicos y la crítica no se ha hecho esperar.

Por El Heraldo





La mañana de este domingo fuentes reales confirmaron que la tradición de la reina Isabel II de enviar tarjetas de cumpleaños a los habitantes de más de 100 años había llegado a su fin, o al menos de la forma en la que se realiza desde 1917 y es que mientras la reina más longeva de la historia estuvo en el poder, era habitual que en dicha tarjeta se incluyera una carta personalizada para festejar a cada ciudadano. En este pequeño detalle también se añadía una foto de la royal, siempre siguiendo su característico estilo de trajes de colores, sombreros y broches, además de su inolvidable collar de perlas.

Ruth Park-Pearson fue una de las primeras personas en recibir la nueva tarjeta de cumpleaños firmada por Carlos III y Camila Parker. (Foto: IG @theroyalfamily)

 

Pero esta tradición dejará de verse de esta manera y es que tras la muerte de Isabel II, ahora es el rostro de Carlos III el que acompañará las tarjetas de cumpleaños; sin embargo, el rey tomó una importante decisión para darle su toque personal al incluir en el retrato a la reina consorte, un detalle con el cual también probar el gran amor que le tiene a su esposa, Camila Parker. Aunque mucha es la polémica que esta pareja ha desatado a nivel mundial, por la infidelidad que habría sufrido Lady Di, no dejan de presumir que incluso con el paso de los años siguen muy enamorados.

A pesar que para muchas personas esta decisión no fue la más acertada, en especial por el polémico ascenso al trono de Carlos III y de su nueva esposa, para otros fue tomada como una forma en la que el nuevo rey comienza a ejercer sus funciones sin necesariamente tener que poner fin a las tradiciones que inició su madre.

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