“El bus daba vueltas sin cesar”: la tragedia que costó la vida a 16 migrantes en Nicaragua

(Foto Reuters)

 

Una de las imágenes que más tiene presente Jefferson Soler, un migrante venezolano de 16 años que sobrevivió a la tragedia donde murieron al menos 13 compatriotas más en Nicaragua, incluida su madre, fue que el autobús en el que se transportaba daba vueltas sin control hasta caer a un precipicio y golpear contra un árbol.

Por Houston Castillo Vado / vozdeamerica.com





Soler salió de Venezuela hace un poco más de 20 días, junto a su familia conformada por seis personas: él, su mamá, su papá, su hermana de trece años, su tía y un primo.

“Planeábamos viajar a Estados Unidos. Pasamos por la selva del Darién y mi mamá lo único que me decía era que, si ella se caía, que siguiéramos pa’ lante”, dijo el joven vía Skype a la Voz de América.

Jefferson Soler (de camiseta azul) vio morir a su mamá Dalia Elena Soler Cortez de 37 años, tras el fatídico accidente de tránsito en Nicaragua. [Foto: Cortesía de Radio ABC Stereo]

La familia se sentía motivada por acercarse cada vez más a su meta. “Ya estábamos cerca de Honduras y México, para terminar de lograr casi la última misión para llegar todos juntos y estar en familia, pero lastimosamente todo salió así”.

El joven recuerda que tras el accidente, intentó ayudar a sacar del bus a su mamá, pero el lugar estaba oscuro y finalmente ella murió en sus manos.

Según el dictamen de la Policía Nacional, el incidente ocurrió en la carretera panamericana norte, en Nicaragua, alrededor de las 6:30 de la tarde en una zona con curvas, conocida como “La Cucamonga”, del departamento de Estelí, ubicado al noreste de la capital.

El dictamen además revela que el conductor del bus, identificado como Alfredo Antonio Palma, de 46 años, dirigía a los migrantes a exceso de velocidad de sur a norte, impactando con dos automóviles.

En el accidente murieron 16 personas, 13 de ellos eran venezolanos. Dentro de esa lista se encontraba la mamá de Jefferson Soler, Dalia Elena Soler Cortez de 37 años, pero sobrevivió su hermana que dice que es la motivación para seguir adelante.

“Le doy gracias al Señor porque mi hermana está bien, se la voy a cuidar a mi mamá y trataré de cumplir sus deseos. Nos dijo que prometiéramos que cuando llegáramos a Estados Unidos fuéramos a estudiar algo con el propósito de ser alguien en la vida, cuidarnos entre nosotros siendo una familia unida”, relató llorando el joven sobreviviente.

Vi la muerte con mis ojos

Leonardo Cortés, de 24 años es otro sobreviviente del accidente. Cuenta que él junto a otro grupo de venezolanos ingresaron a Nicaragua hace unos cuatro días con el mismo fin: Llegar a Estados Unidos.

“La intención era llegar a Jalapa para cruzar a Honduras y de ahí seguir los países hasta llegar a Estados Unidos”.

Pero el accidente marcó su vida incluso de manera sorpresiva, porque tenía temor por otros lugares más riesgosos como el cruce de la selva del Darién, pero jamás pensó que lo peor se daría en un accidente de tránsito en Nicaragua.

“Ver la muerte con los ojos. Eso es muy duro. El chofer del bus iba a muy alta velocidad. El bus tenía muchos pasajeros, alrededor de unas cien personas. Iban muchas personas de pie. Cuando fuimos, sentí el precipicio y comenzamos a rodar y rodar, y nos atajó un árbol. Lo primero que veo es gente gritando con todas las luces apagadas”, relató Cortés.

El hombre de 24 años comenta que también proseguirá el rumbo que tiene de llegar a EEUU, aunque primero quiere cremar el cuerpo de su tía que murió en el accidente.

“Debemos seguir adelante, dándole así sea con las uñas para llegar allá porque ya atrás no tenemos nada. Vendimos todo para poder hacer este viaje”.

Policía revisa pertenencias de personas fallecidas afuera de la morgue en Managua, luego de un accidente ocurrido el miércoles en la carretera Panamericana. Nicaragua, 28 de julio de 2022. REUTERS/Maynor Valenzuela

 

Gobierno de Nicaragua sin apoyar a repatriar cuerpos

Las personas sobrevivientes, en su mayoría son familiares y han pedido apoyo económico para poder primeramente sufragar los gastos de los funerales; pero también para continuar su recorrido hacia Estados Unidos.

El gobierno de Nicaragua, por medio de la vocera y vicepresidente Rosario Murillo, emitió en horas de mediodía del jueves un mensaje de solidaridad y condolencias a las familias de las víctimas y subrayó que están “aguardando los contactos con el Gobierno venezolano” para conocer sus disposiciones. Por el momento no informó si tienen algún plan para apoyar a las víctimas.

“El Comandante Daniel saluda a todas las familias y por supuesto estamos expresando desde la Presidencia, nuestra solidaridad, condolencias, pésames, a las familias que fueron víctimas de la irresponsabilidad al conducir de un grave, trágico accidente que son precisamente los que debemos evitar, evitar el dolor de las familias”, señaló la vocera estatal.