Jubilaciones forzadas y sin pago de prestaciones: el drama de los trabajadores de la alcaldía chavista de Maturín

Jubilaciones forzadas y sin pago de prestaciones: el drama de los trabajadores de la alcaldía chavista de Maturín

Jubilaciones forzadas y sin pago de prestaciones: el drama de los trabajadores de la alcaldía chavista de Maturín

 

 

 





 

Un grupo de jubilados de la alcaldía chavista de Maturín manifestaron este miércoles a las afueras de este ayuntamiento para exigir el pago de sus prestaciones. Afirman que tras la gestión de quien calificaron como “impresentable”, el alcalde psuvista Wilfredo Ordaz, muchos trabajadores salieron por órdenes suyas y al parecer sin haber cumplido el tiempo estipulado.

Corresponsalía lapatilla.com 

El presidente del Sindicato de Empleados Públicos de la Alcaldía y los Consejos Municipales de Maturín, Alexander Granados, denunció que luego de que jubilaran a 92 trabajadores, la actual alcaldesa chavista Ana Fuentes no ha dado respuesta del pago de prestaciones. Indicó que tanto trabajadores activos como jubilados no saben lo que cobran, por lo que piden un diálogo con la mandataria local y la directora de Recursos Humanos, Rosmicer Ramos.

Desde hace seis meses, los trabajadores jubilados no han recibido el pago de sus prestaciones sociales, prácticamente siguen activos, porque no han cobrado el pago de su jubilación. Exigimos que se respete el derecho de todos los trabajadores, los cuales dieron prácticamente toda su juventud y ahora no saben lo que cobran o simplemente no reciben sus pagos. Incluso, a algunos no les están reconociendo sus años de servicio”, explicó el sindicalista.

Jubilaciones forzadas y sin pago de prestaciones: el drama de los trabajadores de la alcaldía chavista de Maturín

 

 

 

Añadió que desde 2019 se viene dando una situación irregular con los empleados al otorgar jubilaciones forzosas, ya que los trabajadores no fueron debidamente notificados. Dijo que de los 92 trabajadores que pasaron a jubilación, muchos tienen enfermedades crónicas y no se les ha dado respuesta.

“A una de estas trabajadoras la conseguí llorando en la oficina de Recursos Humanos, porque a su papá lo atropelló un carro y lo tienen tirado en el hospital. No tenemos HCM digno, asistencia médica no hay, la reinauguración del Instituto de la Mujer es un parapeto. Si en verdad vinieron a cambiarlo todo, vamos a reunirnos y discutir las necesidades de los trabajadores”, expresó Granados.

Puntualizó que trabajadores de diferentes instituciones no cuentan con las condiciones mínimas laborales, como es el caso de quienes trabajan en el Registro Civil, ya que no hay agua ni aire acondicionado.