Alerta en Uruguay: Atacaron a balazos la base naval donde asesinaron a los tres infantes de marina

Policías en el lugar del hecho el domingo pasado

 

En la madrugada de ayer, sobre la 1:30, intentaron ingresar al puesto de control de la antena ubicado en el Cerro donde mataron a los tres infantes de Marina el domingo pasado, según confirmaron fuentes de Ministerio de Defensa a El País.

Por elpais.com.uy





Tras el homicidio de los tres jóvenes militares, la guardia del predio fue reforzada con un efectivo más, por lo que ahora totalizan cuatro personas, armadas con fusiles.

Según la primera versión de los hechos, se trató de dos personas a las que la guardia apostada en el lugar repelió con disparos al aire. Nadie resultó herido. Y de acuerdo a fuentes de Prefectura consultadas, los intrusos no tenían armas. Sin embargo, la Policía dio una versión diferente horas después.

La Seccional 24ª, con jurisdicción en el Cerro, indicó que hubo intercambio de disparos con los delincuentes. Y que fue necesario hacer 11 detonaciones “de advertencia” para que los desconocidos desistieran de sus intenciones. En total, los cuatro marineros de guardia hicieron 24 disparos.

Según la información policial, en momentos en que una patrulla se encontraba recorriendo la zona, se escucharon varios disparos de arma de fuego. Al acercarse a la esquina de Cibils y Etiopía, se encontraron con un móvil perteneciente a la Armada Nacional. Allí tomaron conocimiento que las detonaciones provenían de la antena que se encuentra junto a la Fortaleza del Cerro, protagonista de los tristes hechos del domingo pasado.

Al arribo de los efectivos, se desplegaron equipos de la Armada, los cuales recorrieron el lugar, aunque sin hallar a los desconocidos.

Dos intrusos intentaron ingresar al puesto de control de la antena ubicado en el Cerro, Montevideo, lugar donde fueron asesinados tres infantes de marina el pasado domingo (@cdcamy)

 

Iban en camioneta.

Los efectivos de la Armada manifestaron que varios minutos antes había divisado una moderna camioneta Fiat, que había estado estacionada frente al predio más de dos veces, y que varios desconocidos andaban rondando el predio, “los cuales se manejaban por silbidos”. Al darles la voz de alto por parte de los marineros, no se detuvieron, por los que se procedió a efectuar 11 disparos de advertencia. Ello devino en un intercambio de fuego con los delincuentes, hasta que al arribar personal policial, se dieron a la fuga. En el lugar se hizo presente el cuerpo de Policía Científica.

Horas antes, personal de la Dirección de Investigaciones y de la Dirección de Hechos Complejos encontró en viviendas del Cerro las dos pistolas Glock que pertenecían a los infantes de marina ultimados en la madrugada del domingo 31. Una de las armas fue la utilizada por el asesino para disparar ocho tiros contra las víctimas.

Los tres infantes de marina asesinados

 

Un puesto peligroso.

El puesto de control de la antena ubicado en la falda del Cerro se volvió peligroso. Tras el triple crimen del domingo pasado, se reforzó la guardia (pasando de tres a cuatro personas), pero nadie pensaba que podía volver a ocurrir allí un hecho delictivo en tan poco tiempo.

El ministro Javier García reconoció ante la Comisión de Defensa que “hubo fallas importantes en los protocolos de seguridad que debieron haber existido, y no existieron”.

Las “fallas” en los protocolos hicieron que el propio ministro decidiera el relevo del comandante de la Infantería de Marina, Marcos Saralegui, de quien dependía el destacamento del Cerro. Además, se inició una investigación administrativa que se lleva adelante con profesionales de la Fiscalía y el jefe de jurídica del Ministerio de Defensa Nacional, dejando por fuera a la Armada.

Durante la comisión parlamentaria, García leyó textualmente puntos del informe de la Armada Nacional, así como las comunicaciones que no se cumplieron y los procedimientos que no se conocían.

El ministro resumió que “no hubo ni recorridas ni contacto radial. No se constataron contactos radiales desde la base antena ni hubo, al no escucharlos, acción alguna por parte de la base central en el Cerro, para verificar por qué no había comunicación”.