El impacto del IVA en moneda extranjera sobre la economía venezolana (Videos)

Foto Archivo / La Patilla

 

El nuevo Impuesto al Valor Agregado (IVA) para las transacciones en moneda extranjera entrará en vigencia a partir del próximo 30 de marzo. Las dudas en torno a su implementación y resultados que acarreará esta reforma tributaria, hecha por la asamblea nacional constituyente, siguen en aumento mientras economistas como Ronald Balza y Víctor Álvarez califican la medida de “improvisada” y “sin sentido”. 

Raylí Luján / La Patilla





El profesor Ronald Balza, decano de la facultad de ciencias económicas y sociales de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) insiste en que los impuestos deberían ser cobrados en bolívares, porque de lo contrario, podría convertirse en una medida discrecional que sólo incluya a empresas o comercios grandes.

 

“Hay una sobrecarga de costos para empresas que además tendrían que ser supervisadas para verificar si lo que están declarando es cierto o no, y por esa vía se generan nuevos espacios para la corrupción, puesto que aquel que supervisa siempre puede dar un reporte diferente a lo que efectivamente está observando. Se genera una serie de distorsiones innecesarias e inaceptables. El gobierno venezolano debe cobrar sus impuestos en bolívares y comprar los dólares que necesite y para eso es necesario un sistema cambiario funcionable”, sostiene. 

Balza considera que es necesario que se conozca un presupuesto sobre el destino del IVA en divisas. “Más que generar inflación o no, se justifica porque lo que se vaya a pagar con eso y si es algo con lo que se esté de acuerdo. Por ejemplo: salud, educación pública, y todos los temas que tienen que ver con seguridad o con el funcionamiento de la estructura del Estado”, agrega.

El economista Víctor Álvarez, exministro de Industrias y Premio Nacional de Ciencias explica que al imponerse una sobretasa entre 5 y 25% lo que impulsa es la desestimulación de las operaciones de compraventa por los canales regulares. “Eso va a empujar a que la gente tienda a irse por los caminos verdes y a hacer la transacción de compra y venta sin pedir la factura. Es una medida contraproducente para los propios objetivos del gobierno, que en lugar de recaudar más impuestos en divisas, lo que va es a inducir una mayor informalización y una mayor evasión en el pago de impuestos”, apunta. 

 

Álvarez piensa que la reforma tendrá un impacto agravante sobre la hiperinflación, “porque en lugar de recaudar más impuestos, que corrijan o alivien el déficit fiscal, lo que se va es a agravar la brecha fiscal y el gobierno, para poder cubrir el déficit de Pdvsa, Corpoelec, Hidroven, lo que va a hacer es repetir esa perversa práctica de emitir dinero sin respaldo para llenar ese hueco”.

¿Fin del bolívar?

Para Álvarez, el bolívar prácticamente no existe. “No funciona, está en vida vegetal, está entubado, las funciones del bolívar como unidad de cuenta para definir los precios, como medio de pago para las operaciones de compra y venta o reserva de valor para proteger la capacidad adquisitiva de los ahorros para los pagos internacionales, no lo está cumpliendo a cabalidad y por eso tiende a ser sustituido por el dólar, y hay una creciente dolarización”, sentencia.

El exministro advierte que aunque desde el régimen de Nicolás Maduro se den señales de dar luz verde a la dolarización, teniendo como medida más concreta la derogación de la Ley de Ilícitos Cambiarios, las autoridades siguen “apostando a sustituir el bolívar por el petro y por eso ha hecho estos ensayos de petro aguinaldos, prestaciones sociales en petros, pago de servicios en petros, tratando de impulsar una petroreforma, sustituyendo gradualmente el bolívar por el petro”.

Balza opina que las declaraciones de Maduro en relación a la dolarización son paradójicas. Convierte el proceso en una válvula de escape frente a la política destructiva que ha venido llevando a cabo en los últimos años.

Cree que si bien el uso del dólar como efectivo resolvió una cantidad de problemas, el hecho de que se fijaran precios en relación al dólar o que estos subieran con el precio de la moneda extranjera, no era una prueba de una dolarización.

“El hecho de que se suponga que dolarizar, en el sentido de que se elimine el bolívar, resuelve el problema, lo que te crearía son muchos problemas adicionales. Uno de ellos es que ese medio de pago con bolívares dejaría de estar disponible, y aunque el bolívar no sirve para ahorrar en este momento, si sirve para pagar (…) Si yo te dijera que no se va a tener problemas de corrupción, ni problemas de exceso de gastos, estaría diciendo mentiras enormes, lamentablemente la eficiencia y honestidad no depende de las monedas, el problema es de instituciones, de transparencia y revisión de cuentas”, concluye.